Es indiscutible que es una buena manera de dar a conocer el género, y de que al igual que nos sucedió a nosotros en su momento, alguno de esos jugadores de Wii o DS puede acabar descubriendo que le encanta eso de hablar y resolver puzzles en un videojuego.
Pero como jugador de aventuras con experiencia, nunca se me ocurriría abandonar el PC aunque me dijeran que es el causante de ese bizarro crecimiento sin control de mi miembro.
Los motivos:
- El control: Por mucho que digan algunos, el ratón es insuperable a la hora de manejar una AG.
- La resolución: la Wii sigue siendo una consola PAL con una resolución bastante pobre. La DS ni te cuento
- Tamaño de pantalla: la DS tiene una pantalla del tamaño de una tarjeta de crédito.
- El precio: Los videojuegos de consola son caros, y más ahora que muchas aventuras gráficas se lanzan en PC a menos de 30€.